A la fecha, el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) sólo se ha cumplido en un 35%. Según el diagnóstico que se dio a conocer el pasado miércoles, la ciudad presenta serios problemas en diferentes aspectos como lo son: vivienda, movilidad, pobreza, espacio público, etc., debido a la falta de presupuesto y al bajo seguimiento que se ha hecho del proyecto.

Según lo planteado inicialmente con el POT, se debe hacer revisión cada 12 años del proyecto, es decir que hace 3 años debió hacerse seguimiento. La administración de Petro lo intentó, pero fue suspendido; ahora Peñalosa intenta cumplir, y ya fue culminada la primera etapa: el diagnóstico.

El secretario de planeación, Andrés Ortíz, explicó que la ciudad no creció al mismo ritmo que su población, actualmente la ciudad alberga 9,4 millones de habitantes, los cuales residen en 2.6 millones de viviendas, lo que significa que hay un déficit de 110.926 casas. Por otro lado al inicio del POT se definieron 20 troncales de Transmilenio, de las cuales sólo se construyeron 9. También se hizo la proyección de 431,45 kilómetros de ciclorruta, y sólo van construidos 184 kilómetros.

Otros problemas por los que atraviesa la ciudad son las pocas vías de acceso, existen espacios rurales para los ciudadanos pero no hay forma de llegar a ellos, además la última vía de acceso que se construyó en Bogotá fue la Autopista norte hace 60 años bajo el gobierno del General Rojas Pinilla.

La propuesta que se planteó con este diagnóstico, es empezar a hacer un seguimiento anual del proyecto, no cada 12 años como se tenía previsto, y guiarlo para que cada administración pueda ejecutarlo cumpliendo con sus expectativas de ciudad.

En cuanto al tema de pobreza, en Bogotá hay 925.000 personas viviendo en la pobreza, de las cuales 183.000 viven en pobreza extrema. Al respecto, la solución debe ser la unión entre el sector público y el sector privado, ya que la mayor parte de los ingresos que recibe la ciudad, pertenece solo a un pequeño porcentaje de personas dentro de la misma.

Por ahora la pregunta que se plantea es ¿hacia dónde va a crecer la ciudad? El nuevo Plan de Ordenamiento Territorial debe tener en cuenta las proyecciones de ciudad que se tienen para el año 2050 con la unión entre la ciudad y los municipios aledaños.